Estas tres actuaciones se desarrollan a su vez en diferentes capas: energética, infraestructural, equipamiento y espacio público y reformulación de viviendas. Se pretende revitalizar el barrio y en concreto nuestra zona de actuación aprovechando la alta densidad que tenemos y la falta de equipamientos y servicios, dotando de una mayor diversidad de uso a los bloques y por extensión a las zonas interbloque.
En la actuación de nivel urbano destaca la condición de límite que tiene el barrio (calle30), que aprovechamos para potenciar y sacar beneficio de la visibilidad que ya de por sí presentan estos bloques. También pretendemos dotar de un mayor carácter a la Avda. Donostiarra como enlace con el centro de la ciudad, destacándola de las demás vías. A estudiar se deja el caso de la plaza de toros de las Ventas y su repercusión en la zona o nuestra repercusión en ella.
En el planteamiento que hacemos a nivel de bloque destaca el estudio de cambio de tipologías de vivienda y la introducción de nuevos usos compatibles con ella, de acuerdo a las demandas detectadas en el análisis previo. Se pretende dar mayor valor a la vivienda gracias a esta introducción de nuevos usos de disfrute comunitario. Estos usos tendrán mayor repercusión en las plantas más bajas y estarán relacionados con equipamientos en las zonas entre bloques. Los usos se encontrarán disgregados, así que se plantea el problema a estudiar de cómo conectarlos. También introducimos una nueva fachada que ayuda a introducir lo anteriormente descrito, así como una mejora de las instalaciones.
A nivel de vivienda, se plantean nuevas tipologías a detallar, así como la posibilidad de cambiar los cuartos húmedos por cuartos nuevos prefabricados, que permitan una actualización más fácil, puesto que éstos se encuentran rodeando el patio interior, lo que nos ayudaría a cambiar el patio y hacerlo más útil en cuestiones de soleamiento y ventilación.
